Padre Celestial, que bello es amanecer un día más a tu lado y poder compartir nuevas experiencias con muchas ilusiones. Me siento con mucha alegría al saber que, a pesar de los momentos complicados, nunca me dejas solo y estás velando por mí y mi familia. Que este día sea por completo para Ti.
Iniciemos el día juntos, Padre Amado ¡Compartamos y oremos en comunidad!
Gracias mi Dios porque nuevamente me has despertado junto a mi familia para ver este maravilloso día que nos regala, por haber despertado en nuestro hogar, en nuestra cama y no en otro lugar, gracias por su amor, su bondad y su infinita misericordia, señor dénos las fuerzas para enfrentar toda prueba, dificultad o problema, apartemos de todo peligro o accidente, en sus manos quedamos porque con usted estamos seguros, Amen.