Oración para aguardar bendiciones

Bendito Padre celestial, que hermoso es estar un nuevo día delante de Ti teniendo la confianza y la certeza de que Tú estás a mi lado. Qué bien se siente, amado Señor, saber que tu amor y tu bendición se derraman sobre mí y mi todos los míos.

En estos momentos, Dios mío, me dirijo hacia Ti con mucha humildad y mi total esperanza puesta en tus manos, porque confío en tu misericordia, porque sé que siempre estás atento a escuchar las súplicas de tus hijos. En estos momentos abro mi corazón ante Ti y clamo tu nombre, mi Señor.

Tú conoces mi necesidad, Señor, Tú conoces lo que he sufrido, lo que he llorado y también cuántas veces he sonreído y he sido feliz en tu maravilloso nombre. Es por ello que hoy me acero a Ti y te pido que me sigas bendiciendo grandemente como lo has hecho hasta el día de hoy, Padre amado.

Oración para aguardar bendiciones
Dios de verdad, todas tus bendiciones son bien recibidas en mi corazón agradecido.

Qué grande es sentir tu presencia en mi vida, qué grande es sentir tu acción poderosa moviéndose en mí como un regalo, como un soplo de luz, de paz y sosiego. Yo aguardo tus bendiciones, Señor incomparable, siempre estoy con el corazón dispuesto a sentir tu gracia en mi vida, porque tus milagros nunca se detienen y porque yo creo en Ti y en tu poder sin comparación.

Hoy te pido, mi Padre bueno, que mires una vez más a este siervo tuyo que te aclama y me bendigas de la forma en que Tú creas conveniente. Tú sabes Señor, cuánto es que yo te amo, mi Señor perfecto, Tú conoces cómo es que yo me levanto del fango una y otra vez con un corazón contrito, dispuesto a seguir adelante porque estoy convencido de que Tú vas delante de mí.

Qué bueno es poder sentir tu gracia en mi vida, Señor, incluso en los momentos de silencio, donde callas, aquellos momentos en los que te he llamado con desesperación y Tú has estado a mi lado, pero en silencio, esperando el momento oportuno para actuar. Yo te siento Señor, yo sé que Tú estás aquí y que me bendecirás de gran manera.

Oración para aguardar bendiciones
La bendición del Señor es la que enriquece, y El no añade tristeza con ella.

Yo espero tu bendición Señor, sé que tienes un plan preparado para mi vida y la de cada una de las personas que amo: mis familiares y mis amigos. Yo sé, Señor del universo, que Tú eres bueno y que tu misericordia no tiene límites, por ello estoy convencido de que muy pronto actuarás sobre aquella necesidad que tengo, sobre aquella enfermedad, sobre aquel dolor, duda o pesar, porque no hay nadie más que pueda hacer las cosas como las haces Tú.

Derrama Señor bendito esa agua viva que brota de Ti y hazla caer sobre mí, Dios de la vida. Derrama tu bendición sobre este hijo tuyo que te espera, aún cuando las cosas no salen bien, aún cuando el panorama no es alentador. Yo estoy seguro de que no me soltarás, mi buen Dios y que cada día de vida que Tú me regalas es una bendición.

Toma mi vida entera en tus manos, Dios de poder, pues dispuesto estoy ante todas las bendiciones que Tú tienes para mí, pues yo creo en tus promesas y estoy totalmente convencido de que grandes bendiciones tienes preparadas para mi vida. Te amo, Padre bueno, te adoro con todas mis fuerzas y en este día declaro tu grandeza y tu poder, porque eres el único capaz de hacerlo todo posible.

Oración para aguardar bendiciones
Señor mío, espero en Ti por todas tus bendiciones que llegarán en los momentos justos y necesarios.

Gracias, Señor maravilloso, por regalarme la dicha de conocerte, de poder llamarme hijo tuyo. Gracias Padre bueno, por la familia que me regalas, por el pan que poner en mi mesa, el techo que me acoge y la ropa que me viste. Gracias por el trabajo honrado que me sustenta y porque a pesar de que a veces las cosas se tornan difíciles, Tú nunca nos sueltas.

Cómo no voy a mirar al cielo y darte gratitud, Señor bendito, si tu nombre es capaz de hacerlo todo posible. Te amo en espíritu y en verdad, Rey del universo y quiero quedarme contigo, pase lo que pase, así la situación se complique, dame las fuerzas necesarias para no renunciar a tu camino y quedarme a tu lado por siempre, aguardando las grandes bendiciones que día a día derramas sobre mí y todos los míos.

Me quedo contigo, amado Padre, teniendo la seguridad de que escuchas mi oración. Gracias por aquellas bendiciones que me has dado, por aquellas que estás derramando en estos momentos y por todas las bendiciones que han de venir sobre mi vida y la de todos aquellos que creen en Ti y confían en tu palabra. En el nombre de Jesucristo, Señor nuestro, Amén.