Padre amado, Dios de infinita bondad. Hoy empieza un nuevo día para mí. Un día lleno de pruebas, de bendiciones, de momentos diferentes para aprender y para discernir. Te pido que siempre estés a mi lado en cada instante para poder, junto a Ti, a superar cada prueba que afrontaré. Si estás a mi lado, Dios mío, no me falta nada.
