«Porque estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni lo presente ni lo futuro, ni ninguna otra cosa en toda la creación, podrá separarnos del amor que Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor.»

Nada en toda la creación puede separarnos del amor de Dios manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor, ya que su amor es más grande.