Una nueva mañana me has regalado Padre y yo aquí de rodillas me dispongo a darte las gracias por todo aquello que me regalas, por todo lo que me permites tener y disfrutar, gracias mi Amado Dios, por ser tan bondadoso y generoso conmigo, porque contigo lo tengo todo mi Señor.
Gracias Padre, porque hoy puedo hablarte. Padre bendito, ayúdame para que en este día broten de mis labios palabras sabias; que cada una de ellas sean como un bálsamo a todas las personas que estén a mi alrededor; que mis palabras edifiquen, consuelen y produzcan alegría.
Padre Celestial, gracias por permitir que este día haya podido levantarme de esta cama, porque mi cuerpo me responde y porque mi alma se encuentra en paz, gracias por darme la dicha de este nueva oportunidad de vida, gracias porque hoy puedo comenzar de nuevo.
Te doy las gracias mi Señor, por la familia que me has confiado, porque son el motor que me impulsa a conseguir todo lo que deseo y sueño, gracias por permitir que sean parte de mi vida y yo de la suya, gracias Dios bendito, porque gracias a ellos he conocido la unión familiar, el apoyo mutuo, el sacrificio y el amor verdadero.
Gracias Padre de la misericordia porque el día apenas está comenzando y yo ya siento tus bendiciones en mi vida, porque en mi mesa los alimentos no han faltado hasta hoy, porque me das la fortuna de tener un hogar , de tener trabajo, de tener amigos, gracias por cada una de esas bendiciones mi Dios.
Con un corazón sincero, te pido que este día pueda separarme de los malos pensamientos, de los sentimientos de odio y rencor hacia otros, permite Señor que este día mi alma pueda sentir amor y compasión por los demás, te pido que me protejas del maligno, que está pendiente de mis debilidades.
Padre Celestial, te pido que por favor puedas protegernos este día, el mundo se ha llenado de odio, de personas que viven para hacer el mal a otros, por favor Señor, que nada nos perturbe, que nada nos quite la paz que Tu nos das, por favor mi Dios.
Ayúdame Dios bendito, que pueda este día usar la inteligencia que me has otorgado para hacer el bien a los demás, que pueda encontrar la forma de ayudar a otros, ayúdame a fortalecer mis conocimientos sobre Ti, para poder predicar tu palabra y para poder vivirla también.
Mi Señor, te pido con mucha humildad y esperando siempre se haga tu voluntad, que este día pueda realizar mis actividades cotidianas de la mejor manera, que pueda desempeñarme exitosamente en el trabajo y por favor mi Señor, te pido que puedas estar este día a mi lado, no me dejes solo, quédate siempre conmigo, en el nombre de Jesucristo, Amén.
