Hermoso Señor, Dios de paz y rey de nuestra vida, gracias por todos los dones que nos entregas en esta noche, gracias por todos los alimentos y por todas las personas que se encuentran reunidos alrededor de esta mesa. Gracias porque en esta noche de Navidad, nos sigues bendiciendo y nos sigues regalando tu amor inmenso.
Gracias te doy, Padre bendito, por cada una de las vidas de las personas que están compartiendo la mesa, gracias por su compañía y por permitir que la familia se encuentre reunida. Que estas fechas especiales, sean reflejo de tu amor y de tu gracia.
Te pido también, Divino Señor, por las personas que no se encuentran con nosotros, por aquellos que se encuentran a mucha distancia por diferentes motivos, por aquellos que no se pudieron reunir con nosotros físicamente, pero que siempre están cerca de nuestro corazón.
Reunidos en esta mesa conmemoramos el nacimiento de tu Hijo precioso Jesús. Recordamos la señal de humildad en Belén, que nos impulsa a servir y a vivir bajo el símbolo del amor. Por eso queremos celebrar la llegada de tu Hijo con una cena navideña, una cena fruto del esfuerzo y el trabajo de todos los que estamos aquí reunidos.
Te pido que bendigas cada uno de los alimentos que vamos a compartir, para que nos sirvan para nutrir nuestro cuerpo y que los compartamos con mucha humildad y amor. Gracias por las manos que los han preparado con mucho cariño y amor. Bendice el pan, bendice el vino y todo lo que vamos a compartir, bendice nuestros trabajos para que sea el sustento de lo que comeremos en esta noche fraterna.
Danos tu alegría, tu paz y tu felicidad. Bendice la fraternidad que hay alrededor de esta mesa en esta noche de luz. Que sepamos que eres Tú quien nos invita a cenar y a abrir nuestros corazones para que Jesucristo se quede a vivir dentro de ellos.
Dios misericordioso, Padre compasivo, Dios maravilloso, ilumina esta noche con la estrella que iluminó Belén y que en esta Navidad, florezca el amor, la esperanza, la caridad y la abundancia en este hogar. Todo esto te lo pido en el nombre de tu Hijo, que está apunto de nacer en nuestros corazones, Amén.