Precioso Señor, hoy quiero acercarme a Ti para agradecerte por este nuevo día que pones frente a mis ojos, gracias por la salud con la que mantienes y con la cual me puedo arrodillar y clamar por tu misericordia.
Qué alegría despertar y saber que tu amor está presente desde el primer respiro. Que lindo es saber disfrutar de tus bendiciones y de lo amoroso que eres conmigo y con los míos. Gracias Señor.
Señor, tu amor es para siempre y puedo experimentarlo en todos los momentos que me regalas y los que me vas a regalar. Bendito Seas por siempre, porque hoy no te quiero pedir, sino alabarte y adorarte.
Amado Dios, quiero dejar de la la tristeza y la aflicción, quiero que seas una fuente de alegría, no permitas que las preocupaciones y las pruebas del día me hagan caer y dudar de Ti. Quiero ser optimista y seguir confiando en Ti, mi Dios.
Señor hermoso, ayúdame a reconocer cuáles son los verdaderos motivos y razones para seguir adelante en este camino. Mi familia, mis amigos, mi trabajo y muchas cosas más son importantes para mí en esta vida.
No dejes que me sienta solo y abandonado, que la infelicidad no se aferre a mi corazón. Dame siempre una oportunidad para salir de esos momentos de tensión y de depresión. Acude a mi llamado y devuélvele la alegría a mi corazón.
Quiero gozarme en Ti, en tu amor misericordioso, en tu grandeza y en lo hermoso que es saber que puedo contar contigo en todo momento. Ilumina mi mente con tu luz bendita y ayúdame a tomar siempre las mejores decisiones favorables a mi vida.
Padre Celestial, si mi alma esta desgastada y cansada, te pido en esta oración que la saques de la desesperanza y la tristeza. Ayúdame a saber perdonar y a curar mi corazón de las heridas que sufrí en el pasado.
Quiero ser una herramienta de alegría y de amor, con la que puedas construir un nuevo mundo de esperanza y felicidad, quiero ser el inicio de una fe contagiosa donde el resto puedo ver que tu existencia es la felicidad absoluta.
Gracias Padre bendito, porque estás siempre con tu oído presto a escuchar mis súplicas y mis peticiones, gracias porque tengo muchas ganas de vivir y sobre todo cuando sé que estás presente en mi vida.
Te pido que este día siga siendo como ha iniciado, con mucha alegría, ilusión, esperanza y fe en tus promesas. Pongo a tus pies todos mis proyectos y mis deseos, para poder conseguirlos según tu gracia.
Te agradezco, maravilloso Señor, porque tengo la certeza de que estarás conmigo en los momentos de tormento y de tristeza y que siempre, cuando todo pase, recuperaré la alegría con la que me creaste, en el nombre de Jesús, Amén.