Amado Dios, gracias por este nuevo amanecer que tienes para mí. Te pido, en esta oración humilde, que me puedas conceder un momento de reflexión y de meditación para saber que es lo que tengo que corregir para ser un mejor siervo tuyo.
Inicia esta mañana con una profunda oración para Dios ¡Compártela!