Es un nuevo día y hoy el Señor lo único que nos pide es que confiemos en Él y en los planes que tiene para cada uno de nosotros. Ora con mucha fe y esperanza, sabiendo que Dios te escucha y que esta plegaria puede llegar a ser de mucha bendición en tu vida y en la vida de las personas que amas.
¡No se cansen de orar, pues Dios no se cansa de obrar! ¡Bendiciones!