Si confesamos nuestros pecados a Dios, él nos perdona y nos limpia de toda maldad, dándonos una nueva vida en él.
«Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad.»

Si confesamos nuestros pecados a Dios, él nos perdona y nos limpia de toda maldad, dándonos una nueva vida en él.