Categories: Promesas

«Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres, sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia, porque a Cristo el Señor servís.»

Dios promete recompensar nuestras acciones cuando las hacemos con corazón sincero, como si estuviéramos sirviendo al Señor y no a los hombres.