Oración por mi pareja que no cree en Dios

Bendito Padre, me presento ante Ti con el corazón preparado para recibir tu bendición. Reconozco en Ti al Creador de este mundo que habito junto a todos tus hijos y acepto en mi vida la promesa de tu amor infinito. Esparce tu amor por la Tierra, haznos saber que eres Tú el Dios verdadero.

Señor mío, mi pareja atraviesa momentos difíciles que lo hacen renegar de Ti. Te pido que seas misericordioso, en tu gran paciencia sabrás comprender su situación y ayudarlo a volver al camino correcto.

Altísimo, mi pareja no es mala, tiene buenas intenciones, sus anhelos de vida son claros y ambiciosos. Su voluntad para hacer las cosas me da la impresión de que es una persona con fuertes convicciones; pero no cree en Ti aún, Señor.

Oración por mi pareja que no cree en Dios

Te pido que le ayudes a ver la vida de otra forma, a darse cuenta de que todo cuanto tenemos existe porque Tú en tu enorme amor nos permites tenerlo. Que, si hacemos planes y muchos de ellos se logran, es porque Tú lo permites, bendito Señor. Ayúdale a pensar bajo la luz de tu sabiduría.

Mi pareja no ha tenido la oportunidad de conocer tu historia, Señor. Todo lo que has hecho por este mundo y tus promesas de salvación, mi pareja no lo sabe, Dios Padre. Dale la opción de tener el tiempo prudente para vivir las experiencias que sólo tu amor puede dar.

Sé que vivir en este mundo es una lucha constante entre las buenas acciones y los pecados. Tú nos diste la libertad para elegir lo que mejor nos parezca, pero aceptando también las consecuencias de nuestros actos. Dale, Señor, la capacidad para elegir de manera adecuada. Que reconozca en Ti no un Juez únicamente, sino un Padre Amoroso que estará a su lado cuando más lo necesite, un amigo incondicional que jamás lo abandonará y le ayudará a superar las dificultades más grandes.

Oración por mi pareja que no cree en Dios
Siempre humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros en el amor.

Bendito Señor, que vea en Ti a la fortaleza donde pueda refugiarse; el poderoso escudo que lo protegerá de quienes quieran dañarlo. Deja caer sobre mi pareja la llama de tu Amor. Yo conozco tu Palabra, Padre, Tú nos cuidas y nos proteges de los males de este mundo.

Yo te he permitido entrar en mi corazón, agradezco tu cariño y la fuerza que me has dado todo este tiempo para vivir conforme a tus preceptos. Cuánto quisiera que mi pareja pueda también compartir conmigo de este amor tan grande y tan bonito que tengo por Ti.

Yo confío plenamente en Ti, está en tus santas manos la voluntad para hacer de mi pareja una persona plena, con la fe dispuesta. Yo confío en que llegará el día en que podamos ir juntos a alguna reunión donde se te alabe, incluso ya puedo imaginar que podremos reunirnos los dos y en esa profunda intimidad dirigirnos a Ti, contarte nuestros problemas y ponerlos a tu disposición para que con tu poder nos ayudes avanzar y superarlo todo.

Oración por mi pareja que no cree en Dios
Padre Creador. Permite a mi pareja conocer lo hermosa que es tu bondad y tu amor.

Pero Tú, que todo lo sabes y todo lo ves, sabrás el momento oportuno para escuchar mi petición. Tengo fe, Dios Mío, yo voy a permanecer constante en mi oración. No pasará un solo día sin que hable Contigo.

En el momento en que pueda compartir mi fe con mi pareja, sentiré plenitud en mi corazón. Mi pareja es buena, Señor, ya lo sabes. Tú que puedes ver en su interior, Tú que conoces su corazón puedes ver que tiene principios muy buenos. Por eso, Padre Bueno, te pido que te reveles a mi pareja de manera que también sea parte de todos aquellos que te conocemos y te hemos aceptado como Nuestro Padre.

En nombre de tu Hijo, Nuestro Señor Jesucristo, te pido, Dios Mío, que oigas mis palabras y permitas que la tranquilidad y la bienaventuranza sean nuestra constante en la hermosa relación que tengo con mi pareja. Sé que Jesús, Tu Hijo, Nuestro Salvador, es el único camino para hacer llegar nuestras oraciones hasta Ti. Te agradezco siempre la oportunidad de hablar Contigo. Gracias por escucharme, Te Bendigo y Te Amo. Amén.