Oración para proteger y sellar la casa con la Sangre de Cristo

Padre Santísimo, estoy agradecido contigo por cada una de las bendiciones que derramas sobre mí, por tu constante amor y por todo lo que permites que suceda en mi diario caminar y también, por qué no, por todo lo que quitas de mi vida para mi bienestar. Estoy agradecido por ser tu hijo, por poder hablar contigo y contarte mis penas y alegrías.

Quiero agradecerte mi Señor, por los bienes materiales que me has permitido obtener, porque a través de mi esfuerzo y mi trabajo constante he podido conseguir lo que me es necesario para tener una vida digna y buena en esta tierra.

Gracias mi Señor bondadoso, por cada pedazo de pan que entra a mi casa, por la oportunidad de tener un trabajo digno y obtener ingresos, gracias por la vestimenta que cubre mi cuerpo y el de mi familia, gracias por la educación y por poder superarme día tras día.

Oración para proteger y sellar la casa con la Sangre de Cristo
Amado Jesús, que tu preciosa sangre nos proteja de todo mal y que limpie los pecados que hay en nuestro corazón.

A través de esta oración también mi amado Señor, quiero darte las gracias porque tengo una casa, un hogar para mi familia, donde podemos estar protegidos de los peligros de la calle, de toda maldad y de cada cosa a la que estamos expuestos y nos nos acecha al cruzar la puerta.

Quiero pedirte hoy mi Señor, por esta humilde morada, que aunque no contiene riquezas materiales, sí las tiene espirituales, las tiene en forma de personas a quienes amo y a quienes quiero proteger por sobre todas las cosas. Protege mi casa, bendito Señor, guárdala de todos los peligros y malas intenciones, sella paredes, puertas y ventanas con tu Sangre Preciosa, para que todos los que habitemos en ella quedemos salvos de la maldad.

Te pido que protejas mi casa de las envidias, de las malas intenciones del enemigo, de las personas que no me quieren y de todas las artimañas del enemigo. Aleja los males de mi hogar, aleja las enfermedades y permite, Señor bendito, que mi casa pueda ser siempre un lugar acogedor para quien atraviesa momentos difíciles, y aunque no pueda ofrecer grandezas, encuentren en mi hogar siempre un lugar donde reposar y tener amor.

Oración para proteger y sellar la casa con la Sangre de Cristo
En El tenemos redención mediante su sangre, el perdón de nuestros pecados según las riquezas de su gracia. Efesios 1, 7

Te pido Padre Todopoderoso, con infinito respeto, que puedas derramar sobre mi casa tu bendita Sangre, que cubras con ella cada rincón de mi hogar, para que se convierta en una fortaleza, en un lugar protegido y sellado por tu amor y tu bendición.

Que todo aquel que en mi casa entre se mantenga a salvo de todo peligro y maldad, que tu bendita Sangre se convierta en nuestro escudo protector, que nada penetre mi casa con intención de hacernos daño.

Permite Señor eterno, que tu sangre purifique mi hogar, que todo sentimiento de rencor, de angustia, de dolor, desaparezcan, que la alegría y el perdón inunden mi casa como si fuesen agua de un manantial que corre libre y ligera por el caudal, llevando a su paso todo lo negativo y dejando a su vez un río de bendiciones.

Oración para proteger y sellar la casa con la Sangre de Cristo
Señor Jesús, gracias a tu preciosa sangre derramada, seremos salvados

Con mucha humildad mi Señor, elevo esta oración hacia Ti clamando lo más preciado: que tu bendita Sangre limpie nuestras heridas, cure nuestras almas y nos entregue la paz que tanto buscamos.

Asombro siento de todo tu amor, Padre, de todos tus sacrificios hechos por mí, por mi salvación y la de mis hermanos. No quiero ser indiferente Padre, conozco tu dolor cuando te fallamos y no quiero fallarte más, quiero ir siempre de tu mano Dios eterno, porque solo contigo encontraré la verdadera felicidad y la vida eterna.

Por eso Dios mío, te pido que puedas sellar mi casa con tu poderosa presencia, con Sangre Preciosa Señor, aquella que fue derramada para pagar nuestra deuda, para perdonar nuestro pecado. Permite que mi casa sea un lugar digno de Ti y de tu presencia, que seamos dignos de sentir tu Santo Espíritu, para que podamos tener una guía constante, para poder hacer las cosas correctas y las que te agradan mi Dios, en el nombre de Jesucristo, nuestro Señor, Amén.