Oración de la noche para el 26 de Julio del 2023

Padre de mi vida, el velo nocturno cubre toda mi habitación y yo, quiero encender una vela con mi oración. Gracias bendito Padre, por permitir que me encuentra una vez más antes de entregar mi cuerpo al descanso, porque hasta el silencio y la oscuridad se hacen bellas si Tú estás en ellas.

Quiero empezar, pidiéndote perdón santo Dios, porque quizá me distraje mucho y no pude culminar las cosas que tu me designaste, porque mis errores lastimaron a algunas personas, sobre todo a Ti. Quisiera poder dormir tranquilo si tengo tu absolución Señor, si me abrazas en tu gracia para hacer de nuevo las cosas, para hacerlas realmente bien.

Me refugio en Ti porque eres la única razón para que yo pueda tomar la felicidad como una decisión en mi vida, y no como un momento efímero. Gracias por seguir hasta el final de día conmigo. Ayúdame a siempre poder reconocer con humildad mi indignidad, que no soy perfecto pero que puedo vivir en plenitud si realmente hago tu voluntad. 

Derrama toda tu misericordia por toda mi habitación, mi hogar y en la vida de las personas que la habitan. Cuida mi hogar, a mi familia y amigos. No permitas que algo les cause daño o que sean interrumpidos de sus sueños por los malos pensamientos. 

Buenas noches, que tu sueño sea grato y reparador. Dios te promete un mañana lleno de esperanza.

Quisiera que dispongas de mi vida Señor, ayúdame a poder conciliar rápidamente el sueño y no ser presa de los malos pensamientos que enemigo siembra, haz de mi lo que en verdad quieras. Quiero ser el hijo que necesitas para servir a diario con mucho amor.

Aprovechando el silencio de la noche, quisiera poder escuchar tu dulce voz, Oh Padre bendito, para que pueda saber como realmente tengo que actuar para resolver los problemas que cargo a diario, para poder aumentar confianza en Ti y así puedas ser mi santo médico.

No te alejes cuando la tormenta llegue, ayúdame a sentir tu presencia como un salvavidas cuando el mar enfurece, aleja mi temor y dame fuerza para no dejarme caer fácilmente. Que cuando la indecisión se asome, que la fe aumente en mi Padre misericordioso.

Descanso en Ti precioso Padre, que tu gracia sea el manto que cubra mi cansado cuerpo y tu amor la mejor almohada para apoyar mi cabeza libre de malos pensamientos. Con todo corazón, desearía un precioso amanecer para colocar nuevamente mi esperanza, en el nombre de Cristo Jesús, Amén.