Oración de la noche para el 20 de Junio del 2023

Padre de mi corazón, gracias porque te has mantenido a mi lado y porque hoy descansaré con muchos sueños por cumplir y aunque me sienta muy agotado, mi corazón conserva la emoción de continuar en este camino.

Esta noche, pongo en tus manos mi cansancio y las preocupaciones que rondan en mi cabeza, Tú que eres el Dios de paz, toma todo ello y transfórmalo en descanso para mi cuerpo y en tranquilidad para mi frágil mente. 

Bendito Padre, sin limpiar mi alma no puedo descansar, y hoy de rodillas ante Ti, suplico tu perdón por los daños que hice con o sin intensión, por las palabras imprudentes que tal vez lastiman a mis hermanos, porque mi resentimiento es más fuerte que mi amor, perdón Señor. 

Sabes Señor, a veces no me siento merecedor de tantas bendiciones por mis fallas. Pero incluso esto, me hace ver más allá de todo, me haces ver cuán grande eres en amor, veo que no existe límites para Ti, y que a través de ese amor puedes limpiar toda mancha y cambiar los corazones acongojados de tanto daño que el mundo ofrece.

Me has conservado con salud para poder trabajar con más fuerzas ¡gracias Dios bueno!. Tanto así, que he podido volver a casa y reservar a energía que me queda para conversar contigo esta noche. Gracias porque te descubro no solo en lo bueno y hermoso; sino también en mi tristeza, en mi dolor y miseria. Quiero que tu amor sea siempre mi liberación, mi motor inagotable.

Gracias por cuidar de mi familia, por cómo son conmigo, porque me soportan en los malos momentos y comparten con alegría los buenos. Dales esta noche un sueño conciliador de toda perturbación de todo mal y entrégales un día lleno de vida, te lo entrego Señor, son mi más preciado tesoro.

Padre, rey de los cielos, ayúdame a organizar bien todo lo que me ofreces, desde lo más sencillo como es mi habitación hasta, mi mente, mi trabajo o estudios; todo lo que concierne a mi vida y mi espíritu. Gracias por escogerme a diario mi Dios, por amarme como tu pequeño hijo.

Gracias una vez más, porque podré cerrar mis ojos con la convicción de que estaré bajo tu vigilancia y resguardo. Renueva mis fuerzas y mi corazón, para que cada amanecer y anochecer te siga con la cruz en el pecho, sin volver hacia atrás, en el bendito nombre de Jesús, Amén.