Precioso Señor, esta noche me postro de rodillas para agradecerte por las bendiciones que me concediste a lo largo de esta maravillosa mañana. Ya es de noche, voy descansar, pero primero quiero darte honra y gloria por el hermoso milagro de la vida.
Tú eres el todopoderoso, el Dios de mi vida y de mi corazón. El único digno de alabanza y adoración, porque tu bondad y misericordia son infinitas, porque tu amor llena mi alma y tus bendiciones colman mi vida. Oh Señor mío, quédate siempre a mi lado siguiendo de cerca mis pasos y apartándolos de toda maldad.
Santo eres, Señor de los cielos, esta noche solo quiero dar honra a tu poderoso nombre, porque eres el centro de toda mi vida y porque te mantienes cerca para cuando necesito de un refugio, de un consuelo o simplemente para compartir mi alegría.
Gracias Señor, porque aún en mis tormentas no me dejas solo, porque en mi enfermedad confío mucho en Ti, porque sé que eres el único médico para curar mis males. Gracias porque en los momentos de angustia te conviertes en mi sustento, en mi escudo y en mi consuelo.
Esta noche te pido por este mundo que cada vez está más triste, que se ha olvidado de Ti y que cae siempre en la rutina de lo material. Ten piedad de todos y derrama tu misericordia en cada uno de sus corazones para que puedan entender que el camino que toman no es el correcto y que Tú eres el camino, la verdad y la vida.
Concédeles la gracia de recuperar la esperanza, de volver a creer en Ti y regresar al sendero que nunca debieron dejar. No permitas que el maligno se apodere por completo de sus vidas. Ten compasión de todos ellos y dales la sabiduría para optar por las mejores decisiones en momentos de mucha aflicción.
Gracias nuevamente, amado Dios, por todo lo bueno que pones en mi vida, porque tu poder es inmensurable, porque tu voluntad está sobre todo y porque tu piedad no tiene comparación.
Padre celestial, confío en que mis plegarias serán escuchadas y que me concederás este nuevo día que te pido. Gracias porque me das la certeza de que me protegerás mientras duerma y las preocupaciones que acumulé hoy se irán de mi mente. Mi cuerpo necesita descansar, confío en Ti, mi Dios y te lo pido y agradezco en el nombre de Jesús, Amén.
