Oración de la noche para el 10 de Enero del 2024

Dios de bondad, un día más ha llegado a su fin. Esta noche me postro de rodillas ante Ti para darte las gracias por todo lo que me permitiste vivir, gracias por las personas con las que compartí, gracias por la salud que me prestaste y gracias porque es maravilloso estar vivo y descubrir tu extenso amor.

Gracias bendito Padre, por todas las bendiciones que pude encontrar en mi camino, gracias porque cada noche me doy cuenta que necesito más de Ti, porque te busco constantemente para glorificarte y bendecirte, gracias porque te has convertido en una necesidad para mí. Gracias, Señor, por todos los momentos alegres y tristes que pude experimentar a lo largo del día.

Padre de los cielos, esta noche quiero ofrecerte mi cansancio, mi cuerpo está muy fatigado por las actividades de mi jornada y solo quisiera tener un descanso que pueda reponerme por completo. Sé el guardián que cuidará mis sueños y aleja toda perturbación de mi mente que me impida descansar como lo necesito. Duermo con el anhelo de tener un feliz mañana al despertar.

Señor, pongo a tus pies mis problemas, mis inquietudes y mis preocupaciones, para que las alivies y hagas que desaparezcan de mi vida. Te lo pido en el nombre de Jesucristo, poderoso y rey de mi corazón. Mira con misericordia los problemas que pueda tener y ayúdame a restaurar todo lo que necesito.

Oración de la noche para el 10 de Enero
Es de Noche. Desde el silencio y la serenidad, elevo mi oración para poder descansar tranquilamente.

Divino Padre, quiero aprovechar esta noche para pedirte también por mi familia. Derrama tus bendiciones sobre mi casa y sobre cada una de las personas que la habitan. No desampares nuestra necesidad y muéstrate atento a nuestro clamor; que puedas reinar en el centro de mi hogar y que podamos reconocerte como la persona más importante para nosotros.

Poderoso Señor, te pido que coloques tus manos sobre mí para que puedas curar y sanar todo lo malo que tengo dentro de mí, sana esa enfermedad, sana ese desánimo, cura la envidia que tengo, llévate el orgullo y pon en su lugar salud, fe, humildad y paz desde tu corazón, Padre Santo y bendito.

Esta noche te muestro todo lo que tengo en mente para el futuro, para mañana, para que puedas ser quien tome las riendas de mi vida y decida qué cosas son necesarias para mí.

Gracias, amado Padre, porque tengo la certeza de que mi plegaria está llegando a tus oídos, que podré descansar sin tener que preocuparme por mañana y porque sé que Tú eres el mejor lugar para poder resguardarme y refugiarme de todo mal, en el nombre poderoso de Jesús, Amén.