Oración de la noche para el 2 de Agosto del 2023

Dios amigo, este día está llegando a su fin y ahora, abrazado en la oscuridad de tu noche, me refugio en esta humilde oración. Elevo hacia tu majestuoso cielo, todo mi cariño y mi agradecimiento por haberme permitido continuar lo que resta de hoy en tu compañía.

Gracias bendito Padre, porque te has mostrado muy compasivo conmigo, brindándome muchas oportunidades dibujadas en el amanecer y atardecer, en cada persona que hoy vi y compartí, en cada momento del día que pude contemplarte con todos mis sentidos, pude sentir los rayos cálidos del sol, la refrescante brisa cerca al mar, el cantar de las aves al despertar y disfrutar de la lluvia.

Todo tu amor se manifiesta en tantas cosas inmerecidas por mi pequeñez, porque a diario te fallo Señor. Gracias por la dicha de poder estar vivo y de poder disfrutar tantos buenos momentos, los cuales no hacen que me olvide de ser agradecido, ni de sentirme como el hijo más consentido de tus preciosos ojos.

Te agradezco también Dios mío, por las situaciones complejas que me tocaron vivir, esos momentos donde me sentí rechazado, herido y también frustrado. Todo ello siembra en mí muchas dudas, de las cuales no quiero que sean tan grandes como para perder mi fe. 

Feliz noche, escucha mi oración y fortalece mi fe.

Entre mis debilidades, debo admitir que lastimé tu corazón Señor. Te pido perdón, de rodillas a los pies de mi cama, suplico tu misericordia santo Padre, no lo hago de manera intencional, pero a veces la tentación impulsa mis emociones cuando me siento dolido y no las sé controlar. Quiero volver a ser barro en tus manos mi Dios, hazme de nuevo por favor.

Esta noche, quisiera entregarme a tus brazos para poder descansar tranquilo, te entrego todo lo que pueda atormentarme e interrumpir mis sueños. Toma mis debilidades y mis defectos y conviértelos en fortaleza con el poder de tu gracia.

También quisiera aprovechar para pedirte por la tranquilidad de mis amigos y mis familia. Por si alguno de ellos están alejado de tu presencia, hazlos volver y nacer de nuevo por tu infinita bondad. Cuídalos de todo peligro y de toda perturbación que puedan sufrir, no los alejes de tu rostro por favor, necesitan mucho de Ti.

En tu amor me complazco, me entrego para poder descansar mi cuerpo y mi mente que se encuentran fatigados de todo el trajín que realicé durante el día. Permite que este silencio nocturno me de el alivio que necesito al dormir, con la esperanza de un nuevo y bendecido amanecer, en el nombre de tu Hijo Jesús, Amén.