Oración de la noche para el 1 de Enero del 2024

Divino Señor, el día ha llegado a su fin y me encuentro de rodillas para dirigir mi oración hacia Ti. Quiero darte gracias porque durante todo este tiempo me diste tu protección, tu amor y tus cuidados. Gracias porque no permitiste que el mal se apodere de mí, ni que se acerque a mi casa. Gracias, bendito Dios, porque solo con tu compañía puedo sentirme enteramente feliz.

Dios Todopoderoso, esta noche quiero entregarte toda mi fatiga, mis dolores y todas mis preocupaciones. Te pido, Padre bendito, que puedas llevarte de mi cabeza todo pensamiento de desánimo, de cansancio y desesperanza, que puedas distender mi mente para que nada me perturbe al dormir y así pueda descansar plácidamente.

También quiero pedirte, amado Dios, por mi descanso físico, para que seas Tú quien alivie las enfermedades y los dolores que mi cuerpo pueda padecer. Sé el médico que necesito para que nada se pueda interponer en mi deseo de recuperar mis energías para el día de mañana. Bendito Dios, quiero que mi alma también pueda encontrar calma y quietud para que no se sienta tentada a caer en el mal.

Gracias te doy, Padre Santo, porque en este día me sostuve de tu poderosa mano y pude realizar los planes que tuve. Gracias, Dios mío, porque las decisiones que tomé fueron las correctas, gracias porque prestaste atención a mi oración en todo momento y porque me permitiste llegar al final del día gozando de salud y bienestar.

Oración de la noche para el 1º de Enero
Buenas Noches. Permíteme descansar toda mi ansiedad, mis cargas y mis aflicciones, mi Dios sanador.

Quiero agradecerte, mi buen Señor, por la gracia de concederle salud a mi familia, gracias por ser su protector en todo momento y por permitir que nos reunamos en medio de nuestra mesa para compartir una cena con los alimentos que vienen de tu mano.

Gracias porque nos das la seguridad en el trabajo y porque vigilas nuestros pasos para volver a nuestro hogar donde buscamos refugiarnos. Gracias bendito Señor, porque colocas tu fuerte escudo en las puertas de mi casa evitando que el maligno pueda interferir en nuestra tranquilidad.

Quédate conmigo esta noche, Señor, cuidando mis sueños y escuchando mi oración. Que esta humilde plegarias pueda convertirse en una hermosa ofrenda ante tus ojos, ya que la hago desde el fondo de mi arrepentido corazón, que te ama por sobre todo, Dios de mi vida.

Gracias bendito Padre, porque me das la oportunidad de sentirme amado y protegido por tu mano. Ahora me dispongo a reposar mi cuerpo y a despejar mi mente para tener un descanso que pueda reponer mis fuerzas. Concédeme un día más de vida, si es esa tu voluntad, en el poderoso nombre de tu Hijo Jesucristo, Amén.