Oración de la mañana para el 28 de Octubre del 2023

Señor de mi corazón, nuevamente vengo ante tu presencia y esta vez, para agradecerte por el día precioso que me regalas. Gracias por el infinito amor que me manifiestas, por tu gran misericordia conmigo, porque nunca nos desamparas, porque no nos dejas de lado, porque siempre estás pendiente de nuestros pasos como un Padre vigilante con sus hijos. Permíteme disfrutar el día de hoy lleno de alegría, pues Tú tienes preparadas muchas bendiciones para mí y todos los que creemos en tu Palabra.

Todo lo que haces es perfecto. Todo lo que pones en el mundo lo es. Ayúdame siempre a reconocer que tu amor es esencial para mi vida, que solo por Ti puedo tener salud y un hogar a donde regresar y porque siempre colocas los alimentos necesarios para reponer mi fuerza. Ilumina cada instante de mi vida y permíteme tener tu poderosa bendición.

Pongo todo a tus pies en este día: mis ilusiones, mis sueños, mis esperanzas. Te pido que las aceptes, Oh padre celestial. Bendice siempre mis pasos, quita mis miedos y mis preocupaciones. Dame mucha valentía y sabiduría para poder enfrentar mis batallas, mis obligaciones y mis preocupaciones, siempre de la mejor manera posible.

Regálame un día lleno de tu paz, Señor incomparable, e inunda de tu presencia cada uno de los rincones de mi alma. Que este día saque lo mejor de mí, que mis acciones solo puedan llevar felicidad, esperanza y fe a los que más lo necesitan. 

En esta bella mañana, quiero pedirte también de manera muy especial por mi familia, para que juntos podamos iniciar el día con muchas alegrías y esperanzas. Danos siempre la certeza de que caminas a nuestro lado, que siempre estás dispuesto a acudir en nuestro auxilio. Sé el refugio que necesitamos si nos sentimos agobiados por algún problema. Señor mío, danos siempre tu infinito amor, mantennos juntos y danos la comprensión que necesitamos para perdonarnos.

Oración de la mañana para el 28 de Octubre
Amado Padre, todas mis ilusiones y esperanzas están puestas en tus manos.

Gracias por amarme en mis fortalezas y en mis debilidades, bendito Señor, en mis equivocaciones y en mis tristezas. Gracias porque planificas mi vida de acuerdo a tu santa y perfecta voluntad. Gracias, mi Padre bueno, porque llegas a mí para moldear todo, porque vienes a limpiar mis errores y a darme la oportunidad de regresar a tu presencia, cada vez que herido y avergonzado, me alejo de Ti.

Confío mucho en Ti, mi Dios omnipotente y quiero vivir este día con mucha ilusión y esperanza, quiero disfrutar de todas las bendiciones que me regalas a pesar de todas mis imperfecciones. Gracias por aceptarme con todo lo que hay dentro de mi vida. Por favor, todos los días dame más de Ti y menos de mí. 

Acércate siempre, Señor adorado, no te vayas de mi lado. Otórgame tu fortaleza, tu sabiduría y tu compañía para poder alcanzar mis sueños, mis anhelos y mis metas. Pongo toda mi confianza en Ti y me abandono a tu amor.

Sé que estás escuchando mi humilde oración, que tus oídos siempre se inclinan para prestarme atención y sé que me concederás la dicha de vivir este día junto a las personas que amo. Sé que siempre estarás conmigo en todo lo que hoy pueda emprender. Controla mi vida, guía mis pasos y no me olvides nunca, Señor, yo confío que así será. Todo esto te lo pido y agradezco en el nombre de tu Hijo Jesucristo, Amén.