Dios precioso, la luz del sol anuncia la llegada de un nuevo día, los pajaritos cantan y la suave brisa me demuestran lo magnífico de tu creación. Mis ojos se abren y me levanto lleno de felicidad porque mi cuerpo ha descansado lo suficiente para iniciar una mañana llena de muchos retos.
Gracias te doy porque tengo la confianza de que hoy me concederás un día lleno de muchos objetivos por cumplir. Dios mío, guía mis pasos para no perderme en este día, para hacer mejores cosas y para encontrar la felicidad y esa paz que estoy buscando.
Padre misericordioso, esta mañana quiero decirte que te amo, porque siento tu presencia conmigo desde el primer instante de la mañana. Gracias por todas las cosas hermosas que tienes preparadas para mí y que sólo tengo que ir a por ellas. Gracias por este nuevo despertar y por la salud con la que amanecí.
Quiero pedirte, Dios mío, por las personas que están despertando sumergidas en la preocupación, en los problemas económicos, en la falta de empleo. en la enfermedad o en alguna situación adversa, para que seas Tú quien pueda aliviar y atender sus necesidades.
Derrama sobre ellos muchas bendiciones, para que encuentren el camino de vuelta y que orienten sus vidas buscando tu presencia. En esta mañana, Divino Señor, te pido por el mundo, por los que han perdido la brújula, por los que han perdido la esperanza, por los que están sumergidos en la corrupción y por los que dejan de creen en tu palabra.
También quiero pedirte por mi familia, para que los cuides y los protejas en este día. Dales mucha fuerza para que puedan resistir las pruebas de esta mañana, concédeles seguridad para ir a sus trabajos o a sus labores y poder regresar con bien a sus hogares, Oh mi buen Dios.
Ayúdanos a encontrar la manera de siempre permanecer juntos, a unirnos en oración por nuestros hermanos, a vivir con alegría y mucha esperanza cada día que nos pones delante. Dios precioso, ayúdanos a entender que nuestra vida, sin Ti, sería inexplicable e insostenible.
Padre amoroso, me encomiendo este día a Ti para que me ayudes a vivir este regalo con la sensatez que Tú quieres. Guía mis paso, dame la sabiduría necesaria para tomar buenas decisiones y así poder cumplir todos mis anhelos y los planes que tengo para hoy.
Que nunca me falte tu bendición, Señor. Gracias te doy porque sé que mi oración la escuchas con paciencia y con amor y sé que me concederás las peticiones que te estoy rezando. Todo esto de lo pido en el nombre poderoso de tu único Hijo, Cristo Jesús, el único Señor y dador de vida, Amén.
