Oración de la mañana para el 13 de Junio del 2023

Precioso Padre, amanece y oigo tu dulce voz llegando a mi corazón y no puedo evitar, mirarte una vez más para darte gracias mi Señor. Hoy me despierto con una alegría tan encendida con la luz de tu sol y quiero demostrarte todo mi amor con todo lo que haga en este día, acompañado por tu gracia y tu infinita bondad.

Tengo la certeza de que has preparado algo grande para mi vida, me lleno de ilusión, porque también estoy seguro de que me vas acompañar por el resto de todas las horas que faltan para esta jornada.

Tu hermosa presencia va iluminando toda mi habitación este día, gracias por venir a mi auxilio siempre Señor, por incluirme con mucho cariño en tu libro de vida, porque me manifiestas tu amor de muchas maneras desde el primer rayo de sol, hasta la última brisa que acaricia mis mejillas en la noche. 

Hoy te entrego lo mas preciado que me diste por regalo: mi familia. Te pido por cada uno de ellos, para que este día empiecen con mucho entusiasmo y con las energía renovadas totalmente. Alimenta sus almas con tu Espíritu y llena sus corazones con tu paz, para que puedan reconocerte en cada amanecer y en cada acción que realicen.

Ayúdanos a perseverar en el amor, a que tu presencia unifique nuestra vidas, más allá de nuestras diferentes formas de pensar, porque teniéndote como centro de nuestro hogar, la victoria es Tuya y nuestra ante el enemigo. Lava toda mancha que puedan tener en sus corazones, guárdalos de todo peligro y de toda tentación que quiera perjudicar la jornada que hoy planearon.

Señor Precioso, Tú eres mi Dios y ningún bien tengo si no estoy contigo.

Concédenos la fuerza necesaria, para que cada mañana podamos elevar alabanzas al cielo para Ti y exaltar lo glorioso que es tu nombre sobre la tierra y todo el universo, porque hoy reconozco que todo lo que nos das y nos sigues brindando proviene de tus puras manos.

Padre celestial, tengo un listado de planes para que en cada una pueda glorificarte, pero si algunas cosas se ponen difíciles, ayúdame con paciencia a comprender que todo lo que sucede y lo que no, está vigilado en tu voluntad, tal vez en esta ocasión, no necesito lo que ahora he planeado. 

Dame la gracia de poder vivir y compartir con las muchas personas, y que, a pesar de las adversidades, no pierda la sonrisa en mi rostro, porque tengo la confianza de que todo lo solucionarás en tus tiempos, y que no tengo que preocuparme porque los problemas no son eternos, solo tu amor, tu victoria y tu presencia Señor.

Cuán Santo eres mi Dios, confío en tus palabras, guardo tus promesas en mi ser con las esperanza de que se cumplirán en tu buen tiempo. Hoy empiezo con una mirada al cielo y con las manos dispuestas a ayudar en lo que Tú me pidas bendito Padre, quédate conmigo porque te necesito, en el nombre de Jesús, Amén.