Oración de la mañana para el 11 de Octubre del 2023

Señor de Paz, hoy empieza un nuevo día para mí y confío en que será muy provechoso. Te pido que te quedes conmigo siempre y que no me abandones en ningún paso que daré, porque donde estás Tú, nunca falta nada. Sé que habrán muchas pruebas y muchas bendiciones, por eso estoy convencido que será un día grandioso, solo por tu presencia iluminando mi vida, Señor.

Dios bendito, pongo el día entero en tus manos, sé quien pueda dirigirlo y moldearlo. Que no desmaye con facilidad y que pueda sentir tu fuerza para continuar. Tú conoces todo de mí, mis virtudes y mis debilidades y sé que tienes planes con mi nombre. Guíame siempre por los senderos del bien, por los caminos de justicia y llena mi vida de ilusión y esperanza.

Siempre haz tu voluntad en mi vida, Dios todopoderoso. Si las cosas no salen como espero, dame la tolerancia y la docilidad para aceptar tu voluntad. Despeja mis dudas y mis miedos. Aumenta mi fe constantemente para poder alcanzar tu glorioso reino, Rey de la creación. Quiero avanzar en este día bajo tu mirada y tu protección.

Bendice mi día, Señor, manifiéstate en cada una de mis acciones; que mis tareas siempre sean de tu agrado. Sé que tienes un plan con mi nombre, que tus tiempos son los perfectos y no los míos, dame paciencia para aceptarlo y poder seguir adelante. Oh bendito Señor, sé mi roca y mi espada ante el enemigo y todo mal.

Dios mío, te pido hoy también por mi familia. Pido por sus vidas, dales la salud que necesitan para poder realizar sus labores. Te pido por sus trabajos, para que les des fortaleza para continuar, por sus actividades diarias, para que puedan darte gloria con sus acciones. No permitas que el maligno se meta en sus vidas, nunca los desampares y aléjalos de toda perturbación, Padre mío.

Oración de la mañana para el 11 de Octubre
Señor, pase lo que pase, mantén siempre firme mi fe.

Cuida de mí, inspira siempre mi vida, ilumíname y bendíceme, Señor. Regálame tu luz hoy, dame tu protección, haz que siempre nazca en mí el deseo de buscarte para encontrar tu voz. Acompáñame constantemente y sostenme con tu mano poderosa. En tus manos pongo mi vida, a mi familia y todas nuestras preocupaciones.

Que mi corazón siempre sea agradecido contigo, Padre amado; gracias porque no me abandonas y por las bendiciones que pones en mi vida. Confío siempre en tu palabra. Ayúdame a ayudar a mi prójimo, ayúdame a reconocerte en ellos, ayúdame a sobreponerme a mis frustraciones y ayúdame a reconciliarme conmigo mismo, Dios de victoria.

Dios háblame y cuida mi día. Que tu bondad no se detenga en mi vida. Que tu misericordia alcance a los que la necesitan, por las personas que no tienen el sustento para su hogar, por los que no tienen un techo para refugiarse, por los que no pueden solucionar sus problemas, por los que sufren injusticias. Dales siempre la fortaleza que necesitan para no caer. Dales refugio, dales consuelo y reconfórtalos, Oh Padre bueno.

Señor mío, guía mi vida con amor. Que este día sea fructífero para mí, si es tu voluntad. Regálame paz, prosperidad y de bienestar. Todo esto te lo pido en el nombre de tu Hijo Jesús, Amén.