Hermoso Señor, este nuevo día quiero entregarte mi vida entera, sin filtros ni apariencias. Tú conoces muy bien lo que me fortalece y debilita, aún así me sigues mirando con amor. Toma mi ofrenda y llévalo contigo, haz lo que desees para ser cada vez mejor persona.
Gracias por acariciar mi corazón con este bello amanecer, lo quiero complementar con mi oración de amor y de gratitud. Me siento con la dicha de poder emprender un nuevo viaje hacia tu Altar, Señor. Gracias por esta nueva oportunidad de regocijarme en tu presencia y de poder aprender un poco más de tu amor.
Te doy gracias mi Señor, porque mi familia se encuentra bien, porque nos cuidaste como tus pequeños hijos durante la noche y no dejaste que el mal perturbe nuestros sueños.
Gracias por la bendición de poder estar vivo, porque cada una de las cosas que me brindas, lo haces con mucho amor y por tu infinita misericordia, derramada sobre mi y sobre mi familia; porque tengo una hogar donde poder refugiarme, porque hoy tengo el alimento que necesito para reponer mis energías y sobre todo compartirlo con ellos.
Acompáñame a todos los lugares que iré, ya sea a mi trabajo, a mi casa o cualquier destino, acompáñame con bien y regrésame sin daño ni peligro a mi hogar. Cuida mi vida de cualquier tentación o accidente que perjudique mi integridad.
